Los valores en Japón son ancestrales. Las normas y los códigos de conducta están claros al ser unívocos, uniformes y precisos, pero no por imposición, sino desde el convencimiento personal y respetando la jerarquía establecida. Actuar de forma común es la clave, su espíritu colaborativo, y el hecho de mostrar respeto constantemente, es lo que hace que ante situaciones críticas vitales todos vayan a una gracias a sus códigos de conducta singulares y particulares.
Sonia Chiva. CFO ROLAND DG EMEA.
Los valores japoneses han modelado la forma de pensar y formado las características de la forma en que los japoneses hacen sus negocios.
1. Importancia de las relaciones personales: un sistema de sutiles normas sociales regula cada relación interpersonal, también en los negocios.
2. Guardar las apariencias en público: para evitar desprestigiar a uno mismo y para evitar hacer quedar mal a las personas en público.
3. Autocontrol de los sentimientos y autodisciplina: con independencia de lo que pase.
4. Importancia del silencio: Aunque las palabras son necesarias para expresar los conceptos, el lenguaje impide una comprensión profunda de la realidad que hay más allá de la oral.
5. Esfuerzo por la perfección: dominar la técnica mediante una constante repetición no es suficiente; se debe conseguir hacer las cosas en un estado mental que no exija esfuerzo consciente.
6. Flexibilidad para adaptarse a los cambios: la flexibilidad se obtiene evitando las inclinaciones, siendo capaz de cambiar para adaptarse a las nuevas situaciones. En un mundo en constante cambio es necesario deshacerse de cosas y pensamientos.
7. Todo cambia y nada es permanente: los sucesos son meras circunstancias temporales y las palabras dejan de tener sentido tan pronto como salen de su contexto original, ya que las mismas circunstancias nunca ocurrirán de nuevo.
8. Importancia de las circunstancias: las acciones no son buenas ni malas en sí mismas, sino que su significado y valor dependen de las circunstancias, el propósito, el momento y el lugar.
9. Armonía entre los miembros del grupo: evitar los enfrentamientos directos en la vida diaria. Es el resultado de encontrar una manera apropiada de adaptar los propios deseos a los de los demás.
10. Pertenencia al grupo y cooperación dentro del mismo: el comportamiento individual es educado para fomentar la cooperación dentro del grupo.
11. Jerarquía social y respeto por la edad: el respeto a los mayores y por la experiencia es la base de la jerarquía social de la sociedad japonesa.
12. Importancia de seguir las normas sociales: abarca todos los aspectos sistematizados de la vida diaria hasta el pensar, sentir y actuar con sentido ético, dando a cada persona una posición específica en la familia, en la comunidad y en la sociedad. Y esta posición permite decidir a cada uno lo que debería hacer o no en cada circunstancia particular y utilizar las palabras y acciones adecuadas.
13. Aceptación de los sucesos inevitables: la comprensión de que todos los sucesos no pueden ser controlados, sino que son lo que son, lleva a aceptar los hechos tal como existen.