La trayectoria profesional de Salvador Alemany tiene los elementos necesarios para considerarlo un referente empresarial. Entre otros, ha pasado por el sector bancario, ha sido presidente de la Cruz Roja Cataluña, ha formado parte durante muchos años de la directiva del Barça y actualmente preside la multinacional Abertis. De lo que le han enseñado todas estas experiencias habla en el libro Inteligencia Empresarial: Cómo aprovechar nuestros metros de ventaja, y también en esta entrevista.
REDACCIÓN
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El año pasado publicó Inteligencia Empresarial: Cómo aprovechar nuestros metros de ventaja, un libro en el que explica todo lo que ha aprendido a lo largo de su trayectoria. Si tuviera que destacar una sola lección, ¿cuál sería?
Es difícil mencionar un solo concepto, pero creo profundamente en la frase de Schopenhauer: «El destino reparte las cartas, pero nosotros jugamos la partida», que apela a huir de excusas y victimismos por las cosas que no nos salen bien y ayuda a practicar la reflexión y el análisis cuidadoso de riesgos en cada decisión.
¿Cuál ha sido el mayor error de las empresas españolas durante el periodo previo a la crisis? ¿Vamos por buen camino, ahora, en este sentido?
Nuestras empresas no han cometido errores diferentes ni más acentuados que las del resto del mundo. La euforia y el sobre-endeudamiento del sistema, también empresarial, ha sido un comportamiento generalizado y pienso que nuestras empresas han aprovechado el periodo expansivo con más equilibrio e inteligencia que en otros países. En todo caso, los comportamientos, buenos o malos, no son nunca generalizables.
En alguna ocasión ha comentado que distingue entre «hacer empresa» y «hacer negocio». ¿Cómo debe ser una empresa hoy en día?
Cada empresa debe actuar según su visión y su perfil de valores. Los proyectos que un país necesita, y en los que yo creo, son los basados en un «saber hacer» y con visión de largo plazo. Son empresas que aportan valor añadido a la sociedad en forma de puestos de trabajo, desarrollo económico y social y retorno al inversor que aporta su ahorro. Esto es lo que entiendo como «hacer empresa» y contrasta con negocios basados en operaciones de trading y a corto plazo, aunque sean legales y puedan ofrecer liquidez y dinamismo a la economía.
«El directivo debe estar dispuesto a ofrecer al equipo tanto o más compromiso que el que él está pidiendo»
Ha presidido organizaciones muy diversas, incluidas Cruz Roja Cataluña y el Consejo Social de la Universidad de Barcelona. ¿Qué rasgos debe tener un buen líder para adaptarse a cualquier situación?
No quiero que se pueda hacer una sola definición de «buen líder». Pero mi síntesis sería la de aquella persona que, en cualquier tipo de organización, forma su equipo en base al trinomio «responsabilidad – competencia profesional – solidaridad»; asume personalmente los fracasos más que los éxitos; y es capaz de escuchar a quien conviene escuchar, tomar en soledad las decisiones y debatirlas después con el equipo para mejorarlas y convencer.
También estuvo al frente de la sección de baloncesto del Barça durante 17 años. ¿Qué sacó de esta experiencia que se pueda aplicar a su actividad empresarial?
Que ganar es importante, pero no es lo único importante. La mejora progresiva y permanente es aún más importante. Otra cosa: el directivo tiene que estar dispuesto a ofrecer al equipo tanto o más compromiso que el que él está pidiendo.
Pasamos a su ocupación principal actual, la presidencia de Abertis. ¿Cuáles son los grandes retos de gestionar una empresa del Ibex 35?
La magnitud no es determinante en los retos que tiene que afrontar un gestor. Un trasatlántico y un destructor tienen diferentes dimensiones y finalidades, pero la eficacia de la actuación de uno y del otro depende fundamentalmente de la calidad del equipo; de la claridad de la misión y los valores; y de la coherencia de su liderazgo. Podríamos decir que una empresa cotizada, y particularmente del Ibex, tiene unas especiales exigencias en materia de gobierno corporativo y de transparencia.
¿Cuál es su posicionamiento en la controversia permanente sobre los peajes? ¿Tenemos un buen modelo de autopistas?
El pago en función del uso de las vías de gran capacidad es un modelo que se aplica de forma generalizada en los países de nuestro entorno para poder destinar los presupuestos públicos a las crecientes necesidades sociales propias del estado de bienestar: educación, sanidad, pensiones… El sistema español de vías de gran capacidad tiene un grave problema de coherencia y falta de armonía en el territorio.
La internacionalización es uno de los principales motores de crecimiento de la compañía. ¿Qué se debe tener en cuenta a la hora de mirar fuera de nuestras fronteras?
La clave de la internacionalización de una empresa es su competitividad, y esta se consigue con una especialización de calidad y la dimensión mínima para poder explorar nuevos mercados con suficientes recursos para superar las primeras dificultades. Las pymes son el colectivo empresarial que más PIB aporta en todos los países del mundo, pero a las nuestras les falta un poco más de dimensión para optimizar su competitividad.
«Los proyectos que un país necesita, y en los que yo creo, son los basados en un» saber hacer «y con visión de largo plazo. Son empresas que aportan valor añadido a la sociedad en forma de puestos de trabajo, desarrollo económico y social y retorno al inversor que aporta su ahorro.»
¿La marca Cataluña vende? ¿La ha perjudicado, el proceso?
La marca Cataluña, y más en particular la de Barcelona, tienen una buena imagen en el mundo. Tenemos un país atractivo para las personas y las inversiones. La media exportadora de nuestras empresas tiene un nivel europeo y está por encima de la del conjunto del estado. Tenemos que seguir trabajando en la mejora de los factores que lo hacen posible. En esto centró el CAREC sus esfuerzos.
Precisamente, usted presidió el Consejo Asesor para la Reactivación Económica y el Crecimiento (CAREC). ¿Qué balance hace de la aportación de este organismo?
El CAREC comenzó su tarea en el primer trimestre de 2011 y cerró su etapa en julio del año pasado. La aportación de todos sus miembros en los cuatro años de vigencia se ha hecho de manera desinteresada y no retribuida. Durante las más de 80 reuniones, de tres horas y media cada una, se han elaborado 24 documentos de reflexión y recomendaciones, circunscritas al ámbito económico. El presidente Mas, el conseller Mas-Colell y todo el gobierno mostraron en todo momento la máxima atención a las deliberaciones y recomendaciones del CAREC.
La carrera profesional de Salvador Alemany (Barcelona, 1944) quedó marcada cuando sólo tenía 11 años por un golpe de suerte y una buena decisión. El golpe de suerte: ganó 885.000 pesetas en la quiniela. La buena decisión: sus padres invirtieron el dinero en la compra de un solar para construir un garaje. Ya de mayor, y mientras estudiaba, Alemany se introdujo en el sector trabajando en el negocio familiar y asistiendo a las asambleas del Gremio de Garajes de Barcelona, una entidad que acabó presidiendo. Esta experiencia, así como sus estudios en ciencias económicas, fue clave para conseguir la plaza de director general de SABA que posteriormente lo condujo a su cargo actual en Abertis, la corporación catalana de infraestructuras de comunicación y transporte que preside desde el 2009.