Nada como la realidad para imponerse de forma incontestable a las sesudas predicciones de los seres humanos.
Marcos Urarte. Profesor invitado del Massachusetts Institute of Technology (MIT) y de la Universidad Nacional de Singapur (NUS).
Decía el Global Risk Report del World Economic Forum (Foro de Davos) 2020 que el principal riesgo al que se enfrentaba la humanidad en el año 2020 era el cambio climático. A fecha de hoy, se puede afirmar de forma categórica que ya no es así, aunque lo será, y por desgracia, de forma muy rápida. Nassim Taleb, filósofo e investigador libanés, formuló en 2007 la Teoría del Cisne negro que describe un suceso “altamente improbable, casi impredecible”, de gran impacto socioeconómico y que, una vez pasado, se racionaliza por retrospección haciendo que parezca predecible o explicable, y dando impresión de que se esperaba que ocurriera: “todos somos profetas del pasado”.
La mayoría de los estudios han considerado que la COVID-19 ha sido un “cisne negro”, pero yo creo que ha sido por desconocimiento de otras teorías complementarias. Las más significativas son las de los “rinocerontes grises”, “elefantes negros” y “medusas negras”. A la COVID-19 yo lo catalogaría como un “rinoceronte gris”.
La rapidez en los cambios de escenarios y de los modelos de negocio, nos obligan a crear organizaciones flexibles, ágiles y rápidas, donde en ocasiones hay que renunciar a algún elemento para potenciar otros. A este nuevo mundo, se le ha denominado VUCA (Volatily, Uncertainty, Complexity, Ambiguity). Este concepto fue creado en la Guerra Fría por los EE. UU., y hasta hace aproximadamente siete años, fue utilizado exclusivamente en el mundo militar y en la geoestrategia. Ya incluso antes de la COVID-19, aparecieron algunas variantes alrededor del concepto VUCA, como TUNA (Turbulence, Uncertainty, Novelty, Ambiguity) y BANI (Brittle, Anxious, Non-linear, Incomprehensible) entre otros. Pero, finalmente, la realidad, nos ha llevado a evolucionarlo a un nuevo concepto denominado VI2RCA2S. Hemos tenido que incorporar cuatro nuevas características: Inmediatez, Ruido, Aceleración y Simultaneidad de disparidades.
El mundo se mueve mucho más rápido que los conceptos.
¿Qué caracterizará a esta nueva era?
• El deterioro de las relaciones entre Estados Unidos y China. ¿Se producirá la trampa de Tucídides? ¿Estamos asistiendo al nacimiento de la “Pax Sinica”?
• Debate globalización vs. deslocalización vs. localización.
• Divergencia demográfica. ¿La mitad del siglo XXI será la era de África?
• Mundo hipervigilado. Debate seguridad vs. privacidad.
• Desarrollo exponencial de las tecnologías. La convergencia de la nanotecnología, la biotecnología, la IA, el 5G y la computación cuántica darán vida a la 5ª revolución tecnológica.