El pasado 31 de diciembre entraba en vigor el real decreto ley de la reforma laboral. ¿Qué supone esto para los y las graduadas sociales, en tanto que asesores de empresas y trabajadores?
NEUS PAULET. Secretaria general del Colegio de Graduados Sociales de Barcelona, Lleida y Girona.
En primer lugar, a esta reforma le echo en falta la voz de los profesionales laboralistas, como los graduados sociales, ya que aportan el conocimiento que facilita el aterrizaje de la norma para su aplicación. Los graduados y graduadas sociales gestionamos el 80% de los contratos laborales del país, y las consecuentes tramitaciones vinculadas a ellos, bajas y altas laborales, confección de las nóminas, etc. Por ello, se debe poner en valor nuestra experiencia ante cualquier modificación normativa laboral.
En segundo lugar, cabe prever un incremento inevitable de nuestro volumen de trabajo en un corto periodo de tiempo, como resultado de la transformación de los contratos temporales en indefinidos o fijos-discontinuos.
También comentar un aspecto positivo. Con la desaparición de contratos como el de obra y servicio se produce una reducción del número de contratos existentes, así como una simplificación del contenido. Esto agilizará la tramitación y la burocracia vinculada. Otro aspecto a remarcar es la aparición de los nuevos contratos formativos como herramientas orientadas a mejorar la generación de empleo juvenil, una lacra imperdonable que sitúa a nuestro país en la cola de la UE y de la OCDE. Esperemos que esta reforma contribuya a rebajar ese índice. También es destacable la reducción de los tempos en el encadenamiento de contratos temporales, una práctica que afecta más a mujeres que a hombres y que puede ser un nuevo paso hacia la igualdad real.
En definitiva, los y las graduadas sociales volvemos a ser una pieza clave de este engranaje. Tenemos que exigir que nuestro esfuerzo se acompañe de una administración suficientemente dotada de recursos humanos y técnicos y que, esta vez sí, se facilite nuestra labor en beneficio de empresas y trabajadores.