Bajo el título “Crecimiento débil, riesgos financieros, desafíos fiscales”, el Banco Mundial ha publicado en junio de 2023 su edición semestral de las “Perspectivas económicas mundiales”. El cuadro resume los datos de 2022 y las proyecciones de ese organismo hasta 2025..
JUAN TUGORES QUES. Catedrático de Economía de la Universidad de Barcelona.
Las previsiones del Banco Mundial para 2023 son modestas, en línea con las de otras instituciones, pero asimismo se han revisado al alza en 4 décimas con respecto a la anterior edición del pasado enero. El diferencial a favor de las economías emergentes vuelve a crecer algo en 2023, con las economías asiáticas al frente, especialmente la de la India, que no bajaría del 6%, así como las expectativas de recuperación de China tras el impacto en 2022 de la estrategia de covid-0. Los datos de Rusia, siempre sujetos a especiales reservas, son bajos, mientras que la normalización en América Latina se prevé, como mínimo, “laboriosa”.
En lo que se refiere a las economías avanzadas, 2023 se presenta como un año de especial modestia para la zona euro (aunque con una revisión al alza de las cifras anteriores), mientras que, según el Banco Mundial, 2024 será el año más delicado para Estados Unidos, con elecciones presidenciales de por medio. Los datos para Japón siguen en la línea del “estancamiento secular” y para 2023 son de los pocos que el Banco Mundial revisa a la baja.
