En los últimos meses, muchos actores económicos y sociales han mostrado su preocupación en relación con la opa del BBVA al Banc Sabadell. En esta línea, el Observatori de la PYME de PIMEC ha elaborado un informe con el objetivo de evaluar cómo esta concentración puede afectar a la competencia bancaria, la disponibilidad de crédito, la red de oficinas y la ocupación en el sector.
EL OBSERVATORIO DE LA PYME
Entre los datos que se incluyen en el informe destacamos los siguientes:
IMPACTO EN LA COMPETENCIA BANCARIA
La fusión tendría un impacto significativo en la competencia del sector bancario en Cataluña. Como se incluye en el informe hecho por la ACCO (Autoridad Catalana de la Competencia), el aumento del índice Herfindahl-Hirschman (IHH) en 599 puntos, hasta 2.888, indica un riesgo importante para la competencia. El índice IHH es una medida utilizada para evaluar la competencia. Un valor superior a 2.000 y un incremento del índice de 150 puntos o más indica un mercado muy concentrado con poca competencia, mientras que un valor bajo indica lo contrario.
Por otro lado, si se implementa la fusión, los dos principales bancos, CaixaBank y la nueva entidad resultante de BBVA-Banc Sabadell, controlarían el 73,7% de las oficinas bancarias, lo que reduciría la diversidad de oferta y podría deteriorar la calidad de los servicios para empresas y consumidores (ver cuadro 1).
Este incremento de la concentración en el sector bancario es especialmente problemático en un entorno en el que las pymes ya experimentan dificultades para acceder a servicios financieros competitivos. Además, la disminución de la competencia puede llevar a un aumento de las comisiones bancarias y a una menor remuneración de los depósitos, que afecte tanto empresas como particulares.
Si se implementa la fusión, los dos principales bancos, CaixaBank y la nueva entidad resultante de BBVA-Banc Sabadell, controlarían el 73,7% de las oficinas bancarias
DISPONIBILIDAD DE CRÉDITO
Otro efecto de la fusión es la reducción de la disponibilidad de crédito. Según el informe, que ha analizado lo que ha sucedido en anteriores fusiones bancarias, la concentración podría reducir la competencia y aumentar el poder de mercado de las entidades resultantes, con una disminución del crédito estimada en un 8% (que equivale a 54.393 millones de euros) (ver cuadro 2).
Esta reducción dificultaría el acceso al crédito y elevaría el coste financiero de los préstamos, a la vez que perjudicaría la inversión y el crecimiento del tejido empresarial. Sobre esta cuestión, BBVA ha informado que no se producirá una reducción del crédito sino todo lo contrario, puesto que esperan aumentar el crédito conjunto de las dos entidades en España en 5.000 millones de euros.
REDUCCIÓN DE OFICINAS Y PÉRDIDA DE OCUPACIÓN
La fusión implicaría también una reducción significativa de la red de oficinas de Banc Sabadell y BBVA. Se prevé el cierre de hasta 883 oficinas en el conjunto de España, de las cuales entre 174 y 261 se localizarían en Cataluña. Esta disminución no solo reduciría la accesibilidad a los servicios bancarios, sino que también implicaría una pérdida de puestos de trabajo significativa, con una estimación de pérdida de entre 7.685 y 10.567 empleos. Sobre esta cuestión, hay que tener en cuenta que BBVA ha hecho público que las oficinas que se cerrarán serán solo 300 (ver cuadro 3).
Esta reducción de la red de oficinas afecta especialmente a las zonas rurales y menos pobladas, donde la presencia de oficinas bancarias ya es limitada. Además, la pérdida de puestos de trabajo no solo afecta directamente a los trabajadores del sector, sino que también tiene implicaciones para la economía local, puesto que se reduce el consumo y la actividad económica en estas zonas. Los trabajadores despedidos pueden tener dificultades para reincorporarse en el mercado laboral, especialmente en áreas con una menor oferta de ocupación.
CONCLUSIONES
En resumen, la fusión entre BBVA y Banc Sabadell puede aumentar la concentración bancaria, reducir la competencia y encarecer los servicios, además de causar pérdida de oficinas y puestos de trabajo con efectos negativos. Para minimizar estos efectos, es esencial que las autoridades reguladoras adopten medidas para garantizar una competencia efectiva. Habrá que establecer controles y condiciones para la fusión, que aseguren un compromiso firme con los intereses de todas las partes interesadas. Solo así se podrá garantizar que la concentración no perjudique el tejido económico y social, contribuyendo a una economía más equilibrada y competitiva