El Girona Futbol Club se encuentra este año en lo alto de la clasificación de la liga española. Esto tiene mucho mérito en un club que tiene como principal objetivo deportivo mantenerse en Primera División. Y, además, tiene un presupuesto que no llega al diez por ciento del que tienen el Real Madrid o el Barça. En este artículo se analizan algunas de las claves del éxito logrado.
Oriol Amat. Catedrático de la Universitat Pompeu Fabra y economista
Se debe disfrutar al máximo, pero teniendo claro que debemos tener los pies en el suelo
Pere Guardiola, presidente del Consejo de Administración del Girona
UN CLUB CON HISTORIA
El Girona Futbol Club fue fundado el 23 de julio de 1930, en un momento en el que los clubes gerundenses fundados anteriormente habían desaparecido. Es el caso del Strong Esport, fundado en 1909 y que duró ocho años. O la Unió Esportiva Girona, fundada en 1921 y que cerró en 1930.
A lo largo de su historia, el Girona ha tenido momentos destacados, como la temporada 1935-36, cuando, después de vender dos jugadores clave al FC Barcelona, compitió por el ascenso a Primera División, a pesar de que fue sin éxito. Más tarde, fue muy influyente la figura de Domènec Balmanya, tanto por su paso como jugador al Barça como por el posterior retorno al Girona como técnico.
En los años de la Guerra Civil Española hubo muchas dificultades. Los campeonatos se limitaban a torneos regionales y el estadio Vista Alegre sufrió daños. En 1946 se fundó el Club Esportiu Girona, que unos años más tarde pasó a ser filial del Girona.
En las décadas siguientes, el Girona fluctuó entre Segunda y Tercera División, hasta la construcción del estadio de Montilivi en 1970, que se convirtió en el nuevo hogar del club. El estadio es del Ayuntamiento, pero está cedido al club hasta 2042.
El periodo entre los ejercicios 2005 y 2008 fue crucial, con el club ascendiendo de Tercera a Segunda División A y marcando el comienzo de una nueva etapa.
En la década de 2010 vivió grandes éxitos bajo la dirección de Pablo Machín, con el equipo muy cerca del ascenso directo a Primera y participando en emocionantes playoffs de ascenso. El ascenso a la élite del fútbol español se produjo el 4 de junio de 2017, un logro histórico para el club, puesto que se convirtió en el octavo club catalán que ha militado en Primera División.
En 2017 se produjo otro hecho decisivo: Pere Guardiola, hermano de Pep Guardiola (con la empresa Girona Football Group), y City Football Group entran en el accionariado del Club. City Football Group, propiedad de Abu Dabi United Group, tiene el Manchester City y doce clubes más de Europa, América y Asia. El año 2020 entra en el accionariado MC Girona LLC (firma del empresario boliviano Marcelo Claure). Después de todos estos movimientos la estructura accionarial resultante es:
• Montilivi LTD, que absorbió las acciones de Girona Football Group (15,8948%).
• City Football Group Limited (47,85%).
• MC Girona LLC (35,0395%).
La entrada de los nuevos accionistas marcó el inicio de una nueva etapa, puesto que los nuevos propietarios tienen una visión clara para el futuro: consolidar el equipo en Primera División y dotarlo de las infraestructuras necesarias para convertirlo en un referente a nivel nacional. En la figura 1 se puede comprobar la evolución deportiva del club en los últimos quince años, con una clara línea ascendente.
A continuación repasaremos algunos de los principales factores que explican los importantes éxitos que está logrando el club:
Estrategia orientada al largo plazo: en el mundo del fútbol, como en la política, predomina la visión orientada a obtener resultados a corto plazo, hecho que no acostumbra a dar buenos resultados a largo plazo. En cambio, el Girona prioriza los objetivos a largo plazo, aunque esto a la corta comporte sacrificios e incomprensión. Por ejemplo, en las temporadas en las que ha estado en Segunda División se explicó bien a la dirección deportiva y se consensuó que ajustarían los gastos para cumplir las normas de LaLiga y así no dañar las finanzas del club.
Humildad y benchmarking: la humildad está permitiendo tanto a la dirección económica como a la deportiva tener una buena predisposición para aprender de los mejores y, al mismo tiempo, tener los pies en el suelo con conocimiento de las propias limitaciones.
Apoyo de los accionistas: en los años difíciles de Segunda División, los accionistas hicieron ampliaciones de capital para garantizar finanzas saneadas y apostaron por una plantilla competitiva incluso con la fuerte bajada de los ingresos (ver figura 2). Además, cuando ha habido beneficios, no los han repartido, sino que los han reinvertido en el futuro del club. Esto permite al Girona disponer de un balance saneado con unos fondos propios que representan el 40% de todos los activos, que es lo que se considera deseable y que muy pocos clubes han conseguido.
Gestión económica sin abarcar más de lo que se puede: en el fútbol profesional los resultados económicos acostumbran a ir ligados a los resultados deportivos. Así, en general, cuanto más presupuesto, mejores resultados deportivos y viceversa. Aun así, hay excepciones de equipos que se han gastado centenares de millones y no han conseguido buenos resultados deportivos. El Girona es uno de los clubes más modestos de la Primera División (ver figura 3 con los ingresos que permiten calcular el límite salarial), y por eso debe hacer una gestión económica muy fina, ajustando los fichajes y gastos al nivel de ingresos para mantener el presupuesto equilibrado. Como ejemplo, a lo largo de los últimos años ha hecho los fichajes y ha acordado los salarios de los jugadores una vez sabía en qué división jugaría el año siguiente.
INVERSIONES EN INFRAESTRUCTURAS
La modernización del estadio y las instalaciones de entrenamiento han ayudado a mejorar la experiencia de los aficionados. A nivel de ingresos, la gestión de derechos de televisión, patrocinios y ventas de merchandising han aumentado mucho a raíz de estar en la Primera División.
Aciertos de la dirección deportiva y desarrollo de talento: el Girona tiene el objetivo de poner gran énfasis en el desarrollo de jugadores del filial. Esto debe permitir ahorrar costes en fichajes y también crear una conexión más fuerte con la comunidad. En años anteriores, algunos de los jugadores procedentes del filial han sido vendidos por cantidades significativas a clubes mayores, lo que ha generado importantes ganancias en transferencias. La profesionalización y coordinación entre la gestión económica y la deportiva muestra que se puede competir al máximo nivel sin comprometer la sostenibilidad económica.
ADAPTABILIDAD E INNOVACIÓN
La capacidad del club para adaptarse a cambios y adoptar estrategias innovadoras tanto en el mercado de fichajes como en la gestión financiera ha sido clave. Esta flexibilidad ha permitido al Girona sobresalir en momentos complicados y seguir compitiendo al más alto nivel.
Compromiso con los aficionados
El club contaba con 9.100 socios con abono y 2.500 socios sin este al final de la temporada 2021-2022 y su apoyo ha sido fundamental para el éxito del club. El Girona ha trabajado para mantener una relación estrecha con su base de aficionados, mejorando la experiencia del día de partido y manteniendo los precios accesibles. Esta estrategia ha ayudado a crear un ambiente vibrante en el estadio para apoyar al equipo en cada partido.
Relación con el Manchester City
La colaboración con el Manchester City se ha demostrado extremadamente beneficiosa. A través de esta asociación, el Girona ha tenido acceso a recursos adicionales, como por ejemplo la sesión de jugadores prometedores del City. Esta relación también ha facilitado el conocimiento y las mejores prácticas en áreas como la deportiva y la de marketing, lo que ha potenciado las capacidades del Girona tanto dentro de como fuera del campo.
En resumen, la combinación de una estrategia orientada al largo plazo, gestión financiera prudente y coordinada con la dirección deportiva, inversiones estratégicas, una fructífera relación con el Manchester City, el énfasis en el desarrollo del talento local y el compromiso con los aficionados explican los buenos resultados deportivos y económicos del club.
De cara al futuro, será muy importante la inversión en el estadio. Como dice Ferran Soriano, consejero delegado del City Football Group: “Necesitamos un estadio de Primera División en el que la gente venga a ver partidos de máximo nivel con todas las comodidades, y el actual no lo es”. Estas palabras reflejan la ambición de transformar Montilivi en un estadio de alto nivel, con planes de ampliar el aforo y pasar de los 11.810 actuales a un mínimo de 20.000 espectadores y conseguir una concesión del ayuntamiento para cincuenta años más. Y sobre la Ciutat Esportiva, Pere Guardiola subraya su importancia: “Tener unos buenos campos de entrenamiento es clave también para la captación de nuevos talentos. Los jóvenes futbolistas no necesitarán ir a Barcelona o Inglaterra para estar en la élite”. Y también será fundamental seguir con la gestión prudente y teniendo los pies en el suelo. Sin duda, en el fútbol la suerte también cuenta y la pelota tiene que entrar, pero la buena gestión económica y deportiva ayudan a tener más suerte. Y si en algún momento los resultados deportivos no acompañan, necesitaremos que los dirigentes del club y la afición no olviden las claves que permitieron superar los años malos y convertirse en el club que a principios de 2024 despertó la admiración de todo el mundo.